Grupo 4

Me llamo Rosa tuve que migrar por la crisis que había en ese tiempo y por un futuro mejor para mis hijos, me dieron una carta de invitación para ir a España. Tuve dolor y tristeza ya que deje mi familia, tenía familiares en España, extrañare la comida de mi pueblo y las fiestas en especial a mis hijos y padres.

Cuando llegue la gente me trato muy bien con el tiempo vi que hay gente racista, en el primer día de trabajo mis jefes me trataron muy bien. Me sentía muy rara ya que fue la primera vez en el país, con el tiempo me acostumbre y conocí muchas cosas bonitas de España. Lo volvería hacer pero solo sería un paseo con mi familia.

"Un viaje a España"

Rosa Narcisa tiene 46 años, es una señora muy elegante, con unos hermosos sentimientos, tiene su cabello de color negro, sus ojos son como el capulí, grandes con un color deslumbrante. Tiene una personalidad tan linda, con una actitud muy activa y alegre. Sus fortalezas son: el trabajo, su cariño y su modo de expresarse. Su mayor debilidad es perder a su familia, sus seres más queridos.

Rosa Narcisa es madre de dos hijos y hace más de 18 años lucha por darles de comer y todo lo mejor a ellos y a su querido esposo. Ella trabaja muy duro para traer el pan cada día, en estas épocas tan difíciles. Estaba muy preocupada porque en Ecuador había una crisis muy fuerte, muchos se quedaron sin trabajo.

Un día  recibió una carta para viajar a España por un familiar que tenía allá. Eso la llevó  a tomar una difícil decisión, irse y dejar a su familia, para darles una vida mejor, con más oportunidades o quedarse y seguir luchando por el trabajo en medio de una crisis.

Al final decidió viajar, por lo que también pensó que sería mejor. Con dolor y tristeza dejó a su familia y viajó con la esperanza de salir  adelante.

Al llegar a España lo  primero que hizo, fué ir a la casa de su familiar para hospedarse ahí, todos estaban muy contentos de tenerla ahí con ellos, ya que van a poder disfrutar de su presencia.  Pasaba los días y  se sentía tan sola, por lo que extrañaba a toda su familia, hijos, padres, hermanos, tíos y a su esposo. Un sentimiento de llanto rodeaba todo su rostro, destrozada por dentro solo con la esperanza de volver a verlos.

Una semana después le echó ganas y consiguió un empleo, por lo cual se sintió muy cómoda y agradable, ya que sus jefes eran amables y desde el primer día le trataron bien, sin embargo, en el país había mucha gente racista que criticaban a la gente, solo por venir de otros países.

En ese tiempo notó que había demasiada discriminación hacia los migrantes. La criticaban  por ser mestiza y humilde en ese caso tuvo un problema.

Rosa: Gracias por haberme dado el empleo son tan gentiles.

Marcos: Solo le pido que sepa comportarse y hacer las cosas bien.

María: Señora mañana empieza a trabajar y debe echarle muchas ganas.

Rosa: Si señores, no se preocupen. (Se va a descansar).

Al llegar a su casa se encontró con un señor que al verlo tenía mala vibra, se acercó a ella y aquel señor  le dijo:

Desconocido: ¡Oye tú!, que haces en este país, si tú no eres de aquí.

Rosa: Disculpe yo no le estoy faltando el respeto a usted, así que no tiene derecho a faltarme el respeto.

Desconocido: ¡Cállese! que tú no tienes ningún derecho a dirigirme la palabra india.

Rosa: Sabe que, señor, mejor me voy para que no se arme una discusión más grande, hasta pronto.

Al principio fue muy raro, porque era la primera vez que viajaba, pero poco a poco me fui acostumbrando. Después de unos años regresé a mi país  Ecuador  con un futuro para mis hijos, porque ellos fueron mi  motivación de superarme cada día, la fuerza que tenía era gracias a mis pequeños.

Durante esos años sin estar con ellos, aprendí que uno como madre deja todo por un futuro mejor, gracias a la oportunidad que me dio la vida, pude experimentar muchas cosas buenas y malas, y sobre todo trabajar duro para tener una vida cómoda.

Y agradecer siempre a Dios por estar con nosotros y protegernos.

El cuento es un homenaje a mi tía que gracias a su viaje pudo tener más oportunidades de vida, luchó por tener lo que quería y con gran esfuerzo lo logró.

 

FIN

 

"Es un homenaje para mi tía que fue una migrante más, gracias a sus viajes, tuvo la oportunidad de conocerse ella misma y de lo que es capaz para dar lo mejor"